La falta de descanso físico y mental que supones padecer insomnio se traduce en una serie de consecuencias negativas para nuestra salud. El cansancio y el deterioro de la actividad diurna, la pérdida de atención y de concentración, así como el aumento de la irritabilidad del carácter, son algunas de las manifestaciones de un deficiente descanso nocturno.
Para combatirlo, la fitoterapia ofrece el uso de plantas eficaces y seguras sin los efectos secundarios que presentan los fármacos.
El sueño es considerado como un estado fisiológico, caracterizado por una disminución del nivel de vigilancia durante el cual el individuo descansa. Es un proceso activo en el que se produce una disminución de las secreciones basales, de la frecuencia cardíaca y respiratoria, se ralentiza el metabolismo, se reduce la temperatura corporal y se regeneran los órganos. Además, tiene lugar el procesamiento de la información y de las emociones diurnas.
La función del sueño es permitir que el sistema nervioso se recupere de su fatiga durante su estado de vigilia. Es indispensable para el desarrollo normal de la actividad, hasta el punto que la privación del sueño por espacio superior a las 55/60 horas provoca irritabilidad, incapacidad para concentrarse, visión borrosa y alucinaciones.
El insomnio se caracteriza por la perturbación de la calidad o de la cantidad de sueño lo que provoca la ausencia involuntaria de descanso reparador. La consecuencia de la falta de un buen descanso nocturno es la aparición de diversos trastornos durante la actividad diurna tales como sensación de fatiga, disforia, ansiedad, falta de energía y disminución del nivel de alerta conductual.
La aparición de episodios de insomnio es extremadamente frecuente entre la población adulta siendo más frecuente en el sexo femenino ( aumenta en el periodo premenopáusico y menopáusico) y entre los ancianos.
Con independencia de seguir un tratamiento farmacológico o no, para combatir el insomnio es importante adoptar una serie de hábitos que permitan llevar una buena calidad de vida:
- El ambiente del dormitorio no ha de ser ni muy cálido ni muy frío, ha de estar bien ventilado y, en la medida de lo posible, es necesario aislarlo de los ruidos externos.
- La cena debe ser ligera y equilibrada. Es recomendable ingerir alimentos ricos en hidratos de carbono de absorción lenta y pobres en grasas para facilitar la digestión. Los cuerpos grasos persisten durante más tiempo en el estómago, produciendo sensación de pesadez. Se deben evitar los azúcares de absorción rápida por ocasionar hipoglucemia que puede ser motivo de insomnio a mitad de la noche.
- Las bebidas excitantes y el alcohol están completamente desaconsejados en personas que padecen insomnio.
- El ejercicio físico practicado durante el día tiene efectos positivos en el sueño, aunque deben evitarse los deportes violentos durante la tarde-noche ya que provocan excitación. Sin embargo, un paseo relajante a última hora de la tarde favorecerá la conciliación del sueño.
LA IMPORTANCIA DE DORMIR BIEN
- Incremento de la creatividad: Cuando el cerebro descansa y la producción de hormonas está equilibrada, mejora la memoria, por lo que nuestra imaginación es más potente, somos más creativos.
- Ayuda a no engordar con facilidad: La falta de sueño hace que los adipocitos (células grasas) liberen menos leptina, la hormona supresora del apetito. El insomnio provoca, además, que el estómago libere más grelina (la hormona del apetito).Ambas acciones hacen que dormir poco se asocie a la obesidad.
- Aumenta la resistencia a enfermar: Nuestro sistema inmunitario emplea el tiempo de sueño para regenerarse, lo que permite luchar con eficacia contra las toxinas y los gérmenes que de forma continua nos amenazan. Con un sistema inmunitario débil tenemos más posibilidades de enfermar.
- Protege el corazón: Un estudio reciente afirma que los insomnes tienen tres veces más posibilidades de sufrir insuficiencia cardiaca que los que duermen plácidamente. El insomnio aumenta los niveles en sangre de las hormonas de estrés, lo que aumenta la tensión arterial y la frecuencia cardiaca.
- Reduce la depresión: Cuando dormimos, el cuerpo se relaja y eso facilita la producción de melanina y serotonina. Estas hormonas contrarrestan los efectos de las hormonas del estrés (adrenalina y cortisol) y nos ayudan a ser más felices y emocionalmente más fuertes.
TRATAMIENTO CON PLANTAS MEDICINALES
Las plantas medicinales que se utilizan en el tratamiento del insomnio son plantas con acción neurosedante. Éstas se utilizan en estados de ansiedad y tensión nerviosa, ya que provocan una sedación gracias a que atenúan la hiperexcitabilidad nerviosa. Al contrario que muchos de los somníferos de síntesis química, las plantas medicinales sedantes y tranquilizantes son capaces de inducir al sueño natural y reparador, sin provocar somnolencia residual a la mañana siguiente y sin riesgo de crear dependencia.
- LÚPULO: El lúpulo es una planta vivaz, trepadora que se da en los bosques caducifolios de las regiones templadas. Presenta acción hipnótico-sedante y depresora del sistema nervioso por lo que se utiliza en el caso de malestar asociado a estados de ansiedad e intranquilidad, hiperexcitabilidad e insomnio de origen nervioso, generalmente en combinación con otros sedantes. También tiene propiedades amargo-eupépticas, por lo que se emplea en forma de infusión para estimular el apetito y para aumentar la secreción de jugo gástrico. El empleo de lúpulo está contraindicado en síndromes que cursen con hiperestrogenia, embarazo y lactancia.
- PASIFLORA: La pasiflora también conocida como pasionaria, flor de la pasión o rosa de la pasión es una planta trepadora originaria de América tropical y subtropical. En España se cultiva como planta ornamental. Proporciona un efecto sedante que favorece y prolonga el sueño, por lo que está indicada como tranquilizante especialmente en caso de insomnio, ansiedad, intranquilidad y trastornos nerviosos, sobre todo en niños. Además, la pasiflora también presenta propiedades espasmolíticas con actuación periférica sobre el intestino, de hecho, en los países de origen se utiliza, además, de como sedante, como espasmolítico. Está contraindicado en el embarazo y en la lactancia.
- VALERIANA: La valeriana es una planta herbácea de gran talla que se da en la mayor parte de Europa, en bosques húmedos, prados y márgenes de ríos. Tiene acción sedante sobre el sistema nervioso central, favorece la inducción del sueño y mejora su calidad, por lo que se utiliza como tranquilizante suave en casos nerviosismo generalizado, intranquilidad, insomnio y en estados de ansiedad y tensión. La raíz de la valeriana también presenta una actividad fuertemente antiespasmódica en la musculatura lisa administrándose en caso de dolores espásticos gastrointestinales de origen nervioso. Carece de toxicidad a dosis razonables, sin embargo su uso prolongado crea dependencia, debiendo por tanto prescribirse en tratamientos discontinuos. Frecuentemente, cuando se toma inmediatamente antes de acostarse, como inductor del sueño, produce una cierta ansiedad inicial o sueño intranquilo. Para evitar estos efectos desagradables, se recomienda tomarla al menos una hora antes de la cena. Por su contenido en aceite esencial está contraindicada en el embarazo y lactancia.
- AMAPOLA DE CALIFORNIA: La amapola californiana es una planta herbácea anual que puede alcanzar los 40-50 cm de altura, vive en suelos secos y arenosos. Es una planta con propiedades hipnótico-sedantes, muy utilizada para combatir el insomnio en niños y ancianos, porque posee una acción persistente sin provocar estados de depresión. En el mercado, se suele encontrar asociada a otras plantas sedantes para tratar casos de insomnio. Carece de toxicidad y no presenta riesgos de farmacodependencia. Está contraindicada en casos de glaucoma.
Como podéis ver, hay diferentes formas de tratar el insomnio o la falta de descanso. Opta siempre por lo natural, Cuídate, Mímate y Quiérete muuuchooo. FELICES SUEÑOS.
Esta genial el post. Un cordial saludo.
Gracias!!!